Llevo días con este dolor de cabeza asqueroso, un dolor que me taladrea el cráneo.
No sé que me deparará el mañana.






... tengo miedo -

Existen días en los que uno puede caer, caer en aquel vórtice negro donde no puedes salir.
A veces hay días en los que las nubes tapan el cielo y no te dejan ver el sol, ni el celeste característico.
Solo... hay días en los cuáles no quiero despertar.

Supongo que siempre hay cosas que uno no va a aprender, pero si se hace el intento, algo bueno debe sacarse. No?

A veces me miro en el espejo y me pregunto ¿cómo puedo ser tan mediocre? ¿cómo me pasan estas cosas? ¿cómo me dejo llevar?
No sé, no puedo subir, no puedo repuntar.

Cada vez que voy subiendo, algo baja.
Y hoy en un sólo día, bajé completamente otra vez.
Pero... una vez alguien dijo "vamos que se puede nada es imposible ni una weá"

y voy a seguir eso, y pasaré los ramos.
o me volveré una vieja culiá que no pasada nada.

Estudiar para un examen y estar enferma, es terrible.
Sobre todo si la gripe entró por la puerta abierta, como si la invitara.

Yo no la estoy invitando, quiero que se vaya, quiero que me deje.
Estaba ready para hacer el examen, y ahora me siento como la miegda.

Todos tenemos días y días.
Días buenos, dónde todo es rosa, dónde la felicidad reina cada músculo del cuerpo, dónde sentirse bien es un tópico habitual y las ganas de hacer cosas inunda todo el aire.
Días malos, dónde duele cada músculo, dónde sonreír es dificil, dónde los ojos se llenan de agua con solo pestañear, dónde las cosas se ven negras y raras.

Hoy tengo uno de esos días malos.
Y sé que es normal tenerlos, sé que es más habitual tenerlos dónde estoy yo.
Mi psiquiatra muchas veces me ha dicho que no debo echarme abajo por un simple día así.

pero... a veces tener días malos duele mucho y desgasta más.